3. Competencia y mercado: Uno de los principios fundamentales del CAPITALISMO consiste precisamente en la libertad de mercado, la libre competencia, un sistema basado en la oferta y la demanda que permite fijar libremente las condiciones y facilita que exista la posibilidad de COMPETIR dentro de un sector empresarial, (Art. 38 Constitución española) y la Ley sobre la defensa de la competencia de 1989. Es un sistema que reconoce igualmente el derecho a la PROPIEDAD privada, así como la libre CIRCULACIÓN de capitales, y todo ello se ve aun más reforzado con la entrada en la Unión europea y la CEE que amplía el ámbito territorial de aplicación, prohibiéndose a los estados miembros cualquier práctica que suponga una traba para la libre circulación de personas, bienes y capitales, así como de RESTRICCIONES y medidas de efecto equivalente. No obstante, todo ello sin perjuicio de la posible iniciativa pública empresarial (Art. 128.2 CE), en declive, tendente a la privatización, y sujeta a los Tratados de la UE que exigen en todo caso la publicidad de las contrataciones públicas así como de las ayudas y SUBVENCIONES empresariales.
Por lo tanto, la competencia se considera como un beneficio para la sociedad de consumo ya que afecta a la hora de fijar los PRECIOS, en la calidad de los productos y en la capacidad de decisión tanto de los oferentes como de los adquirentes, proporcionándoles mayor autonomía y opciones de compra. Sin embargo, en este tipo de economía también es precisa la regulación, ya que pese a tratarse de un libre comercio, la falta de normativa llevaría a que los propios competidores renunciarían a competir y se pondrían de acuerdo sobre los precios, impidiendo el objetivo que se pretende en perjuicio de los CONSUMIDORES.
A pesar de ello siguen existiendo prácticas DESLEALES a la libre competencia, las cuales son perseguidas y sancionadas por Órganos como la Comisión Nacional de la Competencia (CNC), por ejemplo, convenios y ACUERDOS de precios entre empresarios, el acuerdo de reparto territorial de mercados, técnicas todas ellas de ámbito privado y tendentes al ABUSO de una posición dominante y monopolista.